La Facultad de Ingeniería del Tecnológico de Antioquia llevó acabo la conferencia Plan de movilidad empresarial sostenible: generalidades y aplicación, la cual hace parte de la serie de conferencias ambientales que realizará la misma durante el 2021.

Jacqueline Betancur Bustamante, Ingeniera Biológica de la Universidad Nacional de Colombia, Magister en Ingeniería ambiental de la Universidad de Antioquia y joven investigador Colciencias, presentó a la comunidad universitaria del TdeA y a diferentes públicos de interés, la conferencia acerca del plan de movilidad sostenible que viene implementando el Área Metropolitana del Valle de Aburra AMVA, dando a conocer sus generalidades, aplicación e importancia dadas las condiciones que se viven en materia ambiental por la prevalencia de los Gases Efecto Invernadero GEI.

En este orden de ideas dio conocer los conceptos de movilidad sostenible, sus beneficios socioeconómicos y ambientales, y explicó igualmente, el Plan en cuestión y la necesidad de que las empresas lo adopten para reducir los efectos del cambio climático en la fauna, la flora y los seres humanos.

“La movilidad sostenible es la acción de desplazarnos de un lugar a otro, teniendo en cuenta una sinergia en el componente ambiental, económico y social y su equilibrio, para mejorar la calidad del aire y la calidad auditiva, especialmente en las ciudades donde se concentra el sector automotor”, Explicó la Ingeniera.

Al respecto, manifestó que los usos de medios de transporte sostenible pueden contribuir a recuperar espacios urbanos que se han perdido, reducir accidentes de tránsito, teniendo un comportamiento más amigable con el medio ambiente. En este aspecto hizo referencia al aprovechamiento de la energía que se tiene cuando nos desplazamos con nuestros pies o empleamos la bicicleta, que se ve reflejado en la salud al ejercitarnos: “Nuestro cuerpo segrega un montón de hormonas como la serotonina, las endorfinas y la dopamina, que nos hacen sentir una sensación de bienestar, estar alegres, tranquilos al disminuir considerablemente sentimientos como la ansiedad y el estrés. Todo lo cual contribuye a que nuestro comportamiento con los demás sea más amable. Otro de los beneficios en el ámbito económico es la reducción de los costos que se producen diariamente en el desplazamiento de un lugar a otro”.

Compartió a los asistentes a la conferencia el Plan de movilidad empresarial sostenible, concebido como el conjunto de estrategias que las empresas deben aplicar para disminuir las emisiones de los GEI que se originan cuando sus colaboradores se desplazan para ir a los lugres de trabajo en automotores que utilizan combustible fósil y que coadyuvan a acelerar el calentamiento global.

“Lo que se plantea con este plan de movilidad empresarial sostenible es que las empresas adopten estrategias para mitigar y reducir las emisiones GEI. De esta manera el mismo se concentra mes a mes en la reducción del Dióxido de Carbono que se obtiene de la combustión de los hidrocarburos. El propósito es pues que haya conciencia ambiental ya que en Medellín y su área metropolitana se tienen unos tiempos críticos debido a la calidad del aire, donde persisten unas condiciones meteorológicas que hacen que se empeore la cantidad de tensiones atmosféricas que se acumulan y empiezan a asentarse en el proceso de respiración humana, atrayendo enfermedades”, manifestó la ingeniera biológica.

Para mitigar la situación Jacqueline presentó algunas de las recomendaciones para poner en acción con los colaboradores de las empresas, dando cumplimiento al Plan, teniendo en cuenta la movilidad en bicicleta, caminar hasta el sitio de trabajo, hacer uso del programa “Encicla”; reducir el número de viajes a la organización a través del teletrabajo, trabajo en casa, reuniones virtuales, flexibilidad de horarios, horarios escalonados, el coworking para reducir el trayecto del viaje y las congestiones; reunirse en lugares equidistantes como centros comerciales para que el recorrido diario sea más corto; almorzar en las oficinas; implementar duchas; establecer rutas empresariales, implementar el pico y placa para los vehículos y motos, reducir celdas de estacionamientos; cobro en los parqueaderos, entre otros, con el fin de racionalizar el uso del transporte que utiliza combustible fósil.

En cuanto al fomento de la cultura Betancur Bastamente habló de brindar educación a los colaboradores, realizar campañas, capacitaciones y talleres de sostenibilidad.

Hizo un amplio abordaje del tema en el que mostró la formulación del Plan y las etapas de planeación, monitoreo, seguimiento para que las empresas entre el primer y segundo año de la implementación de este, alcancen la reducción de un 20% de las emisiones de dióxido de carbono per cápita que producen, como consecuencia de ese desplazamiento del colaborador, desde donde vive hacia su sitio de trabajo.

En concordancia con su exposición, realizó finalmente una reflexión y puntualizó: “Lo peor que podemos hacer por el medio ambiente más que no hacer nada es no lograr sentir empatía. Que a nosotros no nos duelan esas noticias que salen cuando nos informan que hay alerta roja o naranja por la contaminación del aire en el área metropolitana; que no nos duela cuando salen las noticias de los residuos mal dispuestos, contaminando ecosistemas, fuentes de agua; que no sintamos empatía ni dolor por los derrames de hidrocarburos en el océano; que no nos duela cuando nos muestran en las noticias los incendios forestales que se han vivido en Australia, California y saber que hay millones de animales que están muriendo como resultado de un cambio climático generado por la actividad humana. Si no se siente dolor por esto, si no sentimos empatía, con mucha dificultad vamos a adquirir acciones que lleven a mejorar la situación ambiental”.